En el corazón de la región de Basilicata, al sur de Italia, se encuentra Matera, una ciudad que parece suspendida en el tiempo. Conocida como la “Ciudad de los Sassi”, este destino declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO es un tesoro escondido que combina historia milenaria, paisajes de ensueño y una atmósfera que invita a perderse en sus callejones de piedra. Si buscas un lugar donde la historia susurra en cada rincón, Matera es tu próximo destino.
Un viaje al pasado
Matera es una de las ciudades habitadas más antiguas del mundo, con evidencias de asentamientos que datan de hace más de 7,000 años. Sus famosos Sassi —casas cueva excavadas en la roca caliza— son el alma de la ciudad. Estas viviendas, que alguna vez albergaron a comunidades enteras, han sido transformadas en hoteles boutique, restaurantes y museos, sin perder su esencia rústica. Caminar por los Sassi di Matera es como adentrarse en un escenario bíblico, no en vano la ciudad ha sido elegida como telón de fondo para películas como La Pasión de Cristo de Mel Gibson o No Time to Die de la saga James Bond.
El contraste entre la antigüedad de las cuevas y la modernidad de sus interiores es fascinante. Hospédate en un hotel cueva como el Sextantio Le Grotte della Civita para vivir la experiencia completa: paredes de piedra, techos abovedados y vistas al desfiladero de la Gravina que te dejarán sin aliento.
Qué ver y hacer
Matera es un destino para explorar a pie, dejando que cada esquina revele una nueva sorpresa. Comienza tu día en la Piazza Vittorio Veneto, el corazón social de la ciudad, donde puedes disfrutar de un espresso mientras observas la vida local. Desde allí, adéntrate en los Sassi Barisano y Sassi Caveoso, los dos barrios históricos. No te pierdas la Casa Grotta di Vico Solitario, un museo que recrea cómo era la vida en estas cuevas hasta mediados del siglo XX.
Para los amantes de la historia, la Catedral de Matera, construida en el siglo XIII, es una joya del románico apuliano. Su fachada sobria esconde un interior lleno de detalles, y desde su posición elevada ofrece vistas panorámicas de los Sassi. Otro imprescindible es el Parque de la Murgia Materana, un área natural con iglesias rupestres decoradas con frescos medievales, perfectas para una caminata al atardecer.
Sabores de Basilicata
La gastronomía de Matera es un reflejo de su carácter humilde pero profundamente auténtico. Prueba el pane di Matera, un pan rústico con denominación de origen, acompañado de caciocavallo (queso local) y embutidos como la lucanica. Los restaurantes como La Grotta di Platone ofrecen platos tradicionales como crapiata, una sopa de legumbres que es pura alma de Basilicata. Para una experiencia única, reserva en Ristorante Soul Kitchen, donde los sabores locales se reinventan con un toque moderno.
No te vayas sin probar un vaso de Aglianico del Vulture, un vino tinto robusto que captura la esencia volcánica de la región.
Consejos prácticos
- Cuándo ir: La primavera (abril-mayo) y el otoño (septiembre-octubre) son ideales para evitar las multitudes y disfrutar de un clima suave.
- Cómo llegar: Matera no tiene aeropuerto, pero Bari, a unos 60 km, es el más cercano. Desde allí, puedes alquilar un coche o tomar un autobús (aproximadamente 1 hora).
- Moverse: El centro histórico es peatonal, así que lleva calzado cómodo. Para explorar la región, un coche de alquiler es la mejor opción.
- Alojamiento: Desde cuevas de lujo hasta pequeños B&B, hay opciones para todos los presupuestos. Reserva con antelación en temporada alta.
Matera no es solo un destino, es una experiencia. Es el lugar donde el pasado y el presente se entrelazan en un abrazo de piedra, donde cada calle cuenta una historia y cada plato sabe a tradición. Ya sea que busques historia, naturaleza o simplemente un lugar para desconectar, Matera te espera con los brazos abiertos.
Así que, ¿a qué esperas? Empaca tu curiosidad y déjate seducir por la magia de los Sassi. Matera no es un lugar que se visita, es un lugar que se vive.
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